Tiempo de Revolución
En nuestra historia latinoamericana se han escrito páginas de gloria marcadas por el derramamiento de sangre en causa justa de la revolución. Así el 19 de julio de 2009, gloriosamente conmemoramos 30 años de la Revolución Sandinista en Nicaragua.
En aquella ocasión, la guerrilla del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), llamado así en honor a Augusto César Sandino asesinado el 21 de febrero de 1934 por la Guardia Nacional, por estar en contra de una intervención norteamericana en Nicaragua, en 1979 entró triunfante a Managua, consumando la derrota del dictador Anastasio Somoza Debayle, cuya familia pisoteó los derechos del pueblo por años, también en sus dictaduras.
Por su parte, el 1 de enero de 2009 se evocaron cincuenta años de la Revolución Cubana, lograda por la victoria de fuerzas insurgentes en 1959. Predominó el Ejército Rebelde, brazo armado del Movimiento 26 de Julio, comandado por Fidel Castro, cuya lucha derrocó al dictador Fulgencio Batista y estableció el régimen socialista en Cuba. Este triunfo fue alcanzado gracias a la lucha aguerrida del "Che" Guevara, Carlos Bastidas (egresado del Mejía), Fidel Castro, entre otros, llevando a Cuba a ser el único país en alcanzar un nivel alto de desarrollo sustentable en el mundo.
El 5 de Junio del 2010, celebraremos 115 años de la Revolución Liberal, liderada genialmente por Eloy Alfaro en 1895. En ésta se implantó el laicismo en el Ecuador, cuyo hijo primogénito es nuestro querido Colegio "Mejía" y separó al Estado de la Iglesia, logrando la única y verdadera revolución establecida en la historia de la República.
Gustosos debemos sentirnos de estos aniversarios de rebeldía y sobre todo hacer conciencia de nuestra realidad, porque en esta época necesitamos otra revolución que verdaderamente nos libere de la dependencia nefasta norteamericana y nos permita desechar el caduco sistema neoliberal que tanto aprisiona a nuestros pueblos.
Del Mejía al mundo...¡Oda a la revolución latinoamericana¡
Por: Iván Ruiz.
¿Que pasó en la Central?
El día 8 de diciembre del 2009, personas encapuchadas violaron abruptamente las instalaciones de La Universidad Central mientras estaba reunido el Consejo Directivo. Los manifestantes exigían la cabeza del Rector, Dr. Édgar Samaniego.
Las autoridades, conjuntamente con el Rector, se escondieron, pero penetraron a la oficina "estudiantes" con palos y banderas de la FEUE (Frente de Estudiantes Universitarios del Ecuador) y FRIU (Frente Revolucionario de Izquierda de la Universidad), con militantes del MPD, según testimonio del Rector.
Édgar Samaniego, para salvar su vida, tuvo se arrojó por una ventana y huyó. Aturdido intentó escapar pero fue salvajemente golpeado con un palo en la cabeza, que abrió una herida bastante honda. Bañado en sangre siguió corriendo. Fue atendido en la clínica Pichincha donde lo estabilizaron.
Posteriormente se conoció que esta violenta irrupción fue liderada por Marcelo Rivera y Daysi Terán, presidente nacional y provincial de la FEUE, respectivamente, que ahora están expulsados de la Universidad Central. Rivera fue acusado de terrorismo.
¿Por qué se originó esto? La respuesta que obtuvimos fue que en sesión de Consejo Universitario, se planteó la posibilidad de que los colegios universitarios "Odilo Aguilar" y "Manuel María Sánchez" pasen a ser controlados administrativamente por el Rector de la Universidad y no sólo por la Facultad de Filosofía. Por este motivo, los estudiantes de estos dos establecimientos estaban protestando a las afueras de la Universidad.
Preguntamos a un estudiante del colegio "Odilo Aguilar" sobre lo sucedido. Manifestó que los profesores no les dejaron retirarse de la protesta y como si fuera clase les tomaron lista y recibieron la advertencia de que al final también se pasaría asistencia. Su ausencia sería reportada como fuga.
Es lamentable este hecho, pues el Rector agredido es un Mejía de siempre, que en elecciones universitarias derrotó al candidato por el MPD y ex profesor del Colegio Montúfar, Franklin Cabascango. Según manifestó, su lucha para recuperar a la Universidad Central de manos del MPD no parará, por el contrario será más fuerte que nunca. Este es el crudo resultado de mezclar educación con política, pues sea cual sea nuestra tendencia debemos actuar independientemente de nuestra afiliación, porque la unión y la libertad construyen un país más soberano.
Iván Ruiz
